Actualmente existen dos técnicas efectivas para el tratamiento de esófago de Barrett con displasia de alto grado: la radiofrecuencia y/o mucosectomia.

La radiofrecuencia es un método el cuál consiste en aplicar energía de radiofrecuencia a través de electrodos bajo visión endoscópica con el objetivo de que la mucosa se regenere por células normales y se elimine la mucosa de Barrett y con ello el riesgo de cáncer de esófago.

La mucosectomia o resección endoscópica de la mucosa es el método que nos permite extraer en bloque lesiones superficiales para obtener una valoración histológica completa.  Por lo tanto se puede modificar notablemente el diagnóstico y las decisiones terapéuticas.

La radiofrecuencia puede combinarse con resección endoscópica de la mucosa si se observan lesiones visibles.  En gran medida está técnica ha remplazado con gran éxito a la cirugía la cuál consiste en quitar el esófago lo cual conlleva un gran porcentaje de complicaciones.